Tarantino en estado puro. Es una película con luces y sombras, aunque las luces brillan con tal fuerza que por momentos tapan las sombras.
Una de estas luces es, sin duda, el cazador de judíos Landa (intrepetado soberbiamente por Christoph Waltz), verdadero protagonista del film, no los bastardos, a los que Tarantino no ha dedicado el tiempo que se merecían. Y es que el grupo de soldados judío-apaches, que da título al film, no aparece más de veinte minutos en las más de dos horas y media de metraje.
Y es que Hans Landa actúa como una bola de acero girando sobre sí misma en un estirado retazo de suave seda, atrayendo toda la tensión (y la atención) sobre él y sirviendo de bisagra para las tramas paralelas que sacuden con fuerza la Historia, con mayúscula.
Y es aquí dónde Tarantino muestra toda su fuerza, que no es más que su modo de entender el cine, haciéndonos disfrutar con lo que nos habría gustado que pasara pero que no pasó, fantaseando como un niño.
A pesar de que la violencia es una de las señas de identidad del director de Knoxville, ésta no es la característica diferenciadora de la película, sino más bien el derivado natural al que tienden las complejas escenas de tensión que nacen de la pluma del director. Sublime es la escena de la taberna, así como la tensión recreada en el café con Landa, más que digno homenaje a Hitchcock.
Y es que si algo es Tarantino, por encima de creador de cine, es consumidor del mismo. El director cinéfilo por excelencia. Y Malditos Bastardos está llena de grandes referencias al cine mismo. Desde la banda sonora, la música clásica se mezcla en perfecta sintonía con temas western de Ennio Morricone, hasta la fotografía, genial en este apartado el final de la escena del cine, con la pantalla ardiendo y el rostro de la venganza reflejado en el humo.
Pero no todo pueden ser halagos. El montaje es algo decepcionante, recurriendo a la fórmula que ya disfrutamos en Kill Bill: secuencias divididas en capitulos que funcionan como películas en sí mismas, con presentación, nudo y desenlace, que dotan a la película de un ritmo irregular.
En otro orden de cosas, muchos de los personajes carecen de la profundidad adecuada, en especial Aldo Rein (interpretado por Brad Pitt), aunque otros, sobre todo los nazis Landa y Zoller, destacan tanto por sus reflexiones como por sus diálogos. Lo que no hace sino reafirmarme en la idea de que son los nazis los verdaderos protagonistas. Gran acierto en este apartado es la exageración de los personajes "reales". Tanto Hitler, como Goebbels y Churchill, así como el resto del alto mando alemán, no parecen sino caricaturas, dando forma al surrealista final de la película.
Como siempre, me dejo demasiadas cosas en el tintero, pero creo ya es suficiente.
Nota final: 7.5/10
21 de septiembre de 2009, 13:11
Bueno, 20 minutos sólo de aparición, te has pasado, sólo la escena del encuentro con la actriz-espía de los aliados en la taberna infestada de nazis dura más que eso. Aunque sí que es cierto que no tienen tanto protagonismo como para tener preferencia en el título, que por cierto, como suele ser habitual en este país, a algún lumbreras se le ha ocurrido que queda mejor ``Malditos Bastardos´´ que ``Bastardos sin gloria´´, traducción mucho más ajustada y fiel a lo que se ve en el film. Lo de siempre.
21 de septiembre de 2009, 13:23
Bueno, sí, 20 minutos es una exageración pero creo que la idea es clara. Aún así, creo que te confundes con lo del título, ya que inglorious no es tanto "sin gloria" sino más bien "desgraciado". Desgraciados bastardos sería más acertado, y dado que puede ser una expresión algo rara o en desuso, Malditos bastardos, como mascullado con desprecio, no me chirría tanto como otras traducciones.
21 de septiembre de 2009, 13:28
Yo creo que deberías hablar también del estreno de Luna Nueva...
21 de septiembre de 2009, 13:32
Si hablara sobre Crepúsculo o Luna nueva, dormiría en el sofá... :p
21 de septiembre de 2009, 13:44
Por cierto, de acuerdo también con la excelencia cinéfila de Tarantino, descubriéndonos actores que, de otro modo, al menos por mi parte, jamás habría conocido en mi vida como Christoph Waltz. Soberbia actuación. He leído que en un principio había pensado en Di Caprio para el papel, pero después de pensarlo de verdad y de valorar la gran expresividad facial de Leo decidió hacer las cosas bien y mandarle a tomar por culo, como ha de ser.
Otro que me gustó mucho para lo escaso de su actuación fue el tal Til Schweiger, alemán, que con lo poco que hace llena de gloria a su personaje. Y eso que son inglourious.
21 de septiembre de 2009, 13:49
Totalmente de acuerdo. Yo tambien destacaría a Daniel Brühl, el que hace del soldado-actor, convence bastante. Que por cierto, me he enterado esta mañana de que es español, aunque desde pequeño vive en Alemania.
A quien destacaría, pero por malo, es a Eli Roth (el oso judío). Mejor que se dedique a hacer más hostels...
24 de septiembre de 2009, 8:45
Respecto a lo que habeis comentado los 3 iré desde lo más breve a lo más extenso. de luna nueva, pollas en vinagre, lo primero. Respecto a la película, aunque hay ciertos actores un poco cortos de personalidad y supongo que eso ya les deja una ligera laguna en el resto de aspectos, actuación, carisma, etc. el PJ que nombra miguel, Christoph Waltz, me pareció brutal. su actuación llegó a ser tan sublime que en ciertos momentos de la película me planteaba la vida del propio personaje, cómo habría crecido, qué educación habría recibido, cómo llegó a ser lo que era. y todo se debía a una cosa: él mismo. Esto me ha pasado en escasas ocasiones tales como el personaje de Joker, V y poco más... en fin, ya me dirán que les sugiere mi opinión
24 de septiembre de 2009, 8:58
Es que Christoph Waltz, como digo en la crítica, es el verdadero protagonista. Su personaje es sobre el que gira toda la película, el que genera las situaciones y el que las resuelve. Y su interpretación es soberbia.
Tarantino lo eligió porque fue el único que encontró que, además de unas dotes impresionantes de interpretación, sabe hablar alemán, inglés, francés e italiano. Pero es que Christoph Waltz también se defiende en esloveno y húngaro. Vamos, una máquina.
También ha saltado a la fama en Hollywood por esta película, y ya está participando en la adaptación del cómic The Green Hornet, por eso no ha podido acudir estos días al festival de San Sebastián.
No le descartéis para el Oscar™, pues ya ganó el premio de mejor actor en Cannes por Malditos Bastardos.
24 de septiembre de 2009, 9:31
Podrías tener un poquito de respeto con lo que nos gusta a los demás Toñuelillas... a mi no me gusta V, como otras tantas cosas, y no digo que tiren a la basura todo lo que hay de la peli.
24 de septiembre de 2009, 15:22
Vero era una broma... por que ya que te pones asi por tu pelicula. No me nombres solo a mi por que tu querido novio ha escrito esto "Si hablara sobre Crepúsculo o Luna nueva, dormiría en el sofá..." y creo que no he leido nada en referencia a lo que ha puesto el.
Vamos que si nos ponemos asi nos ponemos asi con todo. Y con todos.
24 de septiembre de 2009, 15:33
¡¡¡Hola a todos familia!!!
Empezare con un siiiii,noooo,dudas,comentarios para no desentonar lo que viene siendo mayormente habitual en mis mails.
Respecto a la pelicula, me quedo claramente con el nazi, lo hace muy bien y me parece increible como representa su papel.
Vero no te enfades con el Toñin, seguramente el problema es que tal vez no eligio la mejor frase para expresar su opinion sobre la peli de luna nueva. Cada uno tiene sus gustos y obviamente a todos no nos gusta lo mismo,ahi reside la gracia de las personas, en opinar distinto en muchas cosas.
Yo no he visto la peli de luna nueva, asi que evito dar mi opinion, en cuanto la vea te cuento.
Ser buenos y por la sombra. Siiii,nooo,dudas,comentarios...
24 de septiembre de 2009, 16:11
bueno bueno... Toñin, I'm sorry :( Es verdad que leyendo se pueden malinterpretar las palabras, ¿me perdonas amigüito magrebí? Por fi...
En cuanto a ti, Juanvi, la peli todavía no la han estrenado :P